En la hipótesis de la interlengua el error es un
mecanismo activo y necesario en el proceso de
aprendizaje. Para Corder (1981) los errores tienen tres
vertientes positivas. En primer lugar, son útiles para
el docente ya que si los analiza sabrá en qué punto
del aprendizaje se halla el alumno en relación con
el objetivo propuesto. En segundo lugar, son útiles
para el investigador, ya que le ofrecen indicaciones
sobre los procesos y las estrategias empleadas por el
aprendiente. En tercer lugar, son también esenciales
para este último, puesto que con ellos puede validar
sus hipótesis sobre el funcionamiento de la lengua
que aprende, es decir, son una estrategia más para
aprender. ORTUÑO, Inmaculada B. El error y su consideración en el marco de
la enseñanza de lenguas extranjeras, in LI Congreso Cervantes y la
universalización de la lengua y la cultura españolas (Palencia, 2016).
María Pilar Celma Valero, Susana Heikel y Carmen Morán Rodríguez
(ed.). Palencia, 2016. p. 117. https://cvc.cervantes.es/ensenanza/
biblioteca_ele/aepe/congreso_51.htm Con relación a los errores, señale la alternativa
correcta:
✂️ a) Se valoran negativamente como fuente de
distorsión del proceso de aprendizaje y no se
juzgan positivamente. ✂️ b) Producir errores, pues, no es considerada una
fase natural del aprendizaje. ✂️ c) Es intolerable porque genera hábitos incorrectos y se percibe como un elemento que hay
que evitar a toda costa para que no se fije. ✂️ d) Como el aprendizaje consiste en adquirir e interiorizar las estructuras de una lengua mediante
la repetición, cada error es un fracaso. ✂️ e) Son una característica propia de la creatividad
del individuo y del proceso de adquisición y
aprendizaje de una lengua.